En el último Foro de pensamiento activo de GAM Investments, tres de nuestros profesionales de inversión más brillantes abordaron las causas del cambio de políticas en China, la renta variable japonesa y el cambio en las políticas del país, así como por qué la reciente corrección de las acciones del segmento del lujo podría brindar una oportunidad de compra.
13 de septiembre de 2021
Jian Shi Cortesi, renta variable de China
Tras una significativa corrección estival de la renta variable china, debida, principalmente, a cambios normativos, es importante mirar más allá de la evolución del mercado y centrarse en las causas de ese giro en las políticas y plantearse qué es probable que suceda en los próximos meses. China está en pleno cambio de paradigma en sus políticas hacia la "prosperidad común". Con anterioridad, las autoridades se conformaban con crear riqueza. Actualmente, el 1 % más rico posee el 30 % de la riqueza de China y la mitad inferior posee menos del 10 %. La ampliación de la brecha en términos de riqueza está creando tensiones sociales. No es una situación diferente con respecto a otros países, donde la frustración sobre esta brecha se ha canalizado vía elecciones. El gobierno de China, en el marco de una misión de "servir al pueblo", ha previsto tres brechas en términos de riqueza que abordar: entorno urbano frente a entorno rural, ricos frente a pobres y zonas de costa frente a zonas de interior con rentas inferiores a la media. Los objetivos últimos son lograr una sociedad más armónica, reducir la tensión social y mejorar el bienestar físico y mental de los ciudadanos. No se trata de alcanzar la igualdad en riqueza y rentas, sino de ayudar a que los más desfavorecidos prosperen.
Como hemos visto, el cambio normativo abarca numerosos ámbitos, entre los que se encuentran Internet, vivienda y educación. ¿Pueden continuar las empresas chinas obteniendo beneficios? Confiamos en que muchas puedan adaptarse adecuadamente. En última instancia, China no está en contra de las empresas privadas, pues el sector es fundamental para su crecimiento económico: dichas compañías son responsables de la creación del 90 % de los puestos de trabajo. De cara al futuro, China seguirá enfrentándose al mismo dilema para sus políticas: un exceso de endurecimiento normativo en algunos sectores podría traducirse en pánico y menor inversión y crecimiento económico, mientras que una regulación permisiva lleva a desorden y agudiza la posibilidad de que se cometan fraudes y existan normas laxas. Prevemos que los ciclos de las políticas seguirán determinando el rumbo del mercado bursátil de China. Por ahora, la incertidumbre al respecto ha hecho retroceder las cotizaciones, con las consiguientes oportunidades de compra. Las "estrellas en ascenso" también podrían beneficiarse de una situación de mayor igualdad de condiciones en diversos sectores. En los ámbitos de consumo y tecnología, las valoraciones de algunas empresas parecen atractivas tras la corrección y, a largo plazo, seguimos percibiendo oportunidades en renovables, tecnología, semiconductores y fabricación de gama alta.
Reiko Mito, renta variable de Japón
Japón ha sufrido una especie de revés de corta duración, que puede atribuirse a diversos factores. Han surgido preocupaciones por los retrasos en la vacunación contra la COVID-19 y la normalización económica y existió una opinión de consenso de que la rentabilidad relativa positiva de las acciones japonesas había llegado a su fin a comienzos de 2021 al avanzar más rápidamente de lo previsto la recuperación de China y Estados Unidos. Los problemas relacionados con el gobierno corporativo de célebres marcas japonesas como Toshiba y Mitsubishi Electric han inquietado a los inversores, pero debe señalarse que se trata de temas de empresas concretas y que el gobierno corporativo, en general, está mejorando. Otra problemática es la incertidumbre política tras el anuncio de la dimisión del primer ministro Suga, que se retirará al final de su mandato, ante el aumento de las presiones tras las dificultades para contener los casos de COVID-19 en el país.
Percibimos diversas razones para creer que Japón volverá a repuntar tras quedar a la zaga de otros mercados de todo el mundo. Los beneficios trimestrales de junio fueron mejores de lo previsto y es probable que vuelva a evaluarse la solidez de los fundamentos. El programa de vacunación se ha acelerado desde finales de mayo y está alcanzando los niveles de países occidentales de peso, la presión social, para que la población se vacune, sigue siendo elevada. También ha comenzado la recuperación de la producción basada en la demanda interna, que no solo en la externa. Aunque sigue siendo un riesgo que suban los tipos de interés demasiado rápido, creemos que es improbable que así sea; merece la pena recordar que un alza gradual de los tipos es la evidencia de una recuperación económica sólida. Tampoco perdemos de vista la posibilidad de que se recrudezcan las tensiones entre Estados Unidos y China.
Ya estamos comenzando a asistir a una recuperación y el sector manufacturero, en particular, está impulsando el mercado. La capacidad de trasladar las líneas de producción ha sido fundamental; tras la COVID-19, se están produciendo cambios estructurales para permitir una mayor automatización de la producción y una aceleración de la inversión en nuevas tecnologías. Los factores medioambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG, por sus siglas en inglés) también están centrando cada vez más atención sobre cómo las empresas gestionan a sus proveedores, registrándose mejoras en las cadenas de suministro, por ejemplo, en cuanto a rendimiento medioambiental y anticipación de la rastreabilidad. Es probable que la recuperación del consumo comience en serio en el cuarto trimestre de este año a medida que la hostelería y los viajes, que centran una parte importante de los gastos de los hogares, se recuperen de su debilidad por la pandemia.
Existen diversas oportunidades de inversión que nos resultan atractivas en este momento. En el sector de los bienes de equipo, percibimos demanda acumulada de maquinaria de producción que contribuya al medio ambiente, la eficiencia de los combustibles y la rentabilidad de la producción. También avanza la transformación digital, que es de esperar que permita a las empresas potenciar sus ingresos efectivamente sin incrementar sus costes fijos. La inversión en inmovilizado es sólida, lo que sugiere crecimiento a largo plazo.
Swetha Ramachandran, renta variable de lujo
Cuando las marcas de lujo publicaron durante el verano sus resultados del segundo trimestre de 2021, no tardó en mostrarse evidente el robusto rendimiento de explotación del sector. De media, hemos asistido a una aceleración del crecimiento de los ingresos en los dos últimos años, con sólidas cifras comerciales en regiones principales como China, Estados Unidos y Europa. Por su parte, la expansión de los márgenes ha sido sustancialmente mejor de lo esperado y es posible que los partícipes más sólidos la mantengan. La mayoría de las acciones europeas del sector del lujo había alcanzado, efectivamente, máximos históricos a mediados de agosto, hasta que las observaciones de China sobre la "prosperidad común" llevaron a una marcada oleada de ventas. Las autoridades se han comprometido a elevar el número de personas que conforman el grupo de rentas medias de China, aumentar los salarios de los grupos con rentas bajas y prohibir los ingresos ilícitos para promover la justicia social y "ajustar razonablemente" los ingresos excesivos. Es importante señalar que estas iniciativas tienen como fin crear oportunidades para lograr nuevos consumidores, no centrarse en los más acaudalados.
En última instancia, la demanda de lujo, en especial, en China, guarda relación con el crecimiento de la clase media, no con los ultrarricos. Por tanto, consideramos que las políticas para "crear oportunidades para que más personas se conviertan en ricas" son un factor positivo a largo plazo para el sector del lujo y consideramos improbable el riesgo de que se adopten medidas precipitadas para restringir el consumo. También creemos que, el ajuste a la baja del sector ofrece una oportunidad de compra atractiva de cara a la temporada de compras de las fiestas y campañas posteriores, al hallarse las tasas de ahorro de los hogares todavía en niveles récord. El sector del lujo tiende a evolucionar rápidamente tras las correcciones y rebotar con fuerza; dados los sólidos fundamentos, prevemos que esta vez también se producirá una situación similar. De cara a más largo plazo, el sector sigue contando con una posición ideal para aprovechar el crecimiento de los mercados emergentes con un coste de capital propio de la esfera desarrollada. La brecha entre los ganadores y los perdedores es la mayor de la historia y consideramos que una selección ascendente de valores y una gestión activa son aspectos clave para aprovechar este tema de inversión.
La información que se recoge en este documento se ofrece con fines meramente ilustrativos y no constituye asesoramiento de inversión. Las opiniones y las valoraciones recogidas en este documento pueden variar y reflejan el punto de vista de GAM en el entorno económico actual. Se declina toda responsabilidad con respecto a la exactitud y la exhaustividad de la información. Las rentabilidades pasadas no son un indicador fiable de rentabilidades futuras ni de tendencias actuales o futuras. Los instrumentos financieros mencionados se ofrecen con fines meramente informativos y no deben considerarse una oferta directa, una recomendación de inversión o un asesoramiento de inversión. Los valores que se enumeran han sido seleccionados de un conjunto de títulos analizados por los gestores de carteras para ayudar al lector a comprender mejor los temas presentados y no forman parte necesariamente de una cartera de inversión ni representan recomendaciones de los gestores de carteras. No se garantiza que las predicciones vayan a cumplirse.